COMPETENCIA DE PLANES
A 26 días de las PASO y cuando todavía faltan 44 días para la elección definitiva aparecen los primeros lineamientos de propuestas contrapuestas. Lineamientos que se siguen confundiendo con los mensajes de campaña.
Desde el lado de la LLA, mientras Milei continúa dando cátedras sobre moneda y dolarización, los principales asesores van reconociendo que la dolarización no puede realizarse en el corto plazo (Epstein), que del cepo se va a salir “lo más rápido posible”, o sea, no el día 1, (Mondino, Marra y Rubini), que sería necesaria una mega licuación de los pasivos en pesos para despesificar (Carlos Rodriguez) y que el BCRA no será eliminado (Nápoli). Incluso el propio Milei descalifica a los economistas que cuestionan la dolarización, afirmando que él habla de competencia de monedas y no dolarización.
Desde Juntos por el Cambio, el flamante referente económico Carlos Melconián fue al programa de Fantino para explicar “EL PROGRAMA”. Más allá de la retórica utilizada, lo nuevo fue el reconocimiento de que avanzaría en un desdoblamiento formal del mercado de cambios. Subyace detrás la idea planteada por Domingo Cavallo en su último informe mensual. En el mismo tras reflexionar sobre el fracaso de la devaluación del 22% post paso (sólo 48 horas duró la compresión en la brecha cambiaria y en menos de dos meses se pierde el adelanto cambiario conseguido), concluye que no se encuentran en la actualidad las condiciones para llevar a cabo ni una dolarización ni un esquema bimonetario. Propone un desdoblamiento cambiario formal, libre movilidad de capitales en el segmento libre del mercado cambiario y un tipo de cambio oficial controlado para el segmento comercial, símil al plan primavera del 88. No especifica quien accedería a un dólar y al otro.
El razonamiento luce excesivamente optimista en un contexto donde el exceso de pesos de corto plazo sigue siendo elevado y crea endógenamente pesos y además de empezar con reservas negativas en el BCRA no se cuenta con fondos suficientes para la cancelación de las deudas comerciales y los dividendos atesorados. Además, la historia no lo convalida, nunca corriendo de atrás el tipo de cambio financiero convergió al oficial y no queda claro porqué el financiero libre se ubicaría en el medio entre el oficial y el CCL, cuando se quite la enorme cantidad las trabas cruzadas que hoy operan en el mercado de cambios.
En suma, seguimos de campaña hasta el 22 de octubre, y si hay segunda vuelta hasta el 19 de noviembre. Los incentivos a plantear los lineamientos ciertos de un programa de estabilización que permita pasar de un esquema de represión financiera y brecha a uno de mayor libertad económica no aparecen ni van a aparecer hasta definida la elección. Por lo pronto, la transición va a requerir optar entre mantener el perverso status quo, y/o un intermedio entre licuación y reprogramación de los vencimientos de pesos. La incertidumbre sobre el programa, incluyendo el planteo del desdoblamiento de Melconian reduce la efectividad de las herramientas de cobertura (tipo de cambio futuro, DLK y LEDIV) y aumenta la presión sobre la brecha.
En el interín, entre la intervención con dólares y con bonos y el nuevo programa Dólar Soja (DNU 443/2023) que desvía un 25% de lo liquidado a abastecer la oferta de brecha, el BCRA pareciera haber logrado algo de aire en la última semana. Desde los máximos, los dólares financieros libres (exceptuamos el TC oficial y el MEP) retroceden entre el 5% del blue hasta el 10% el CCL.
Según la Bolsa de Cereales de Córdoba podrían llegar a liquidarse USD2.500 millones con ventas entre 4,5/5 millones de toneladas de los 11 millones disponibles entre la mercadería sin vender y la que no tiene el precio fijado. Además del impacto sobre la brecha, el BCRA volvió a comprar dólares en el MULC, USD186 millones desde el inicio del programa.
INTERNACIONAL
Por más de que el último año haya visto turbulencias políticas en América Latina, la inversión extranjera directa alcanzó los USD225.000 millones, 55% más que el año previo superando con creces el máximo alcanzado una década atrás. Brasil explica el 41% de la IED Latam y se ubica en el quinto lugar a nivel mundial. A pesar de la alarma en Washington por el creciente interés chino en América Latina, Beijing y Hong Kong representaron sólo el 3% del capital que ingresó en la región el año pasado. Una cifra muy inferior al 38% de Estados Unidos o al 29% de la UE (aunque algunas inversiones chinas podrían haberse canalizado a través de terceros países).
La transición energética se perfila como uno de los sectores impulsores del crecimiento económico, que puede convertirse en gran motor de la transformación productiva de la región, por lo que los países y sus territorios deberían priorizarlo en el marco de sus políticas y agendas de desarrollo productivo. El porcentaje de la capacidad instalada de energía renovable de América Latina y el Caribe es superior al promedio mundial, y la matriz de generación eléctrica es una de las más limpias del mundo. Por lo tanto, si incrementa su oferta de energía renovable, la región podría convertirse en origen de la oferta de bienes que hoy en día se producen en países con matrices relativamente menos limpias. La IED puede desempeñar un papel fundamental a la hora de acelerar la transición energética, facilitar la transferencia tecnológica y posibilitar las tecnologías emergentes.