Monitor Semanal #780

OPTIMISMO DEL PLANIFICADOR 

La violenta corrección de los mercados del viernes fue seguida de un lunes aún más negro. La volatilidad, medida por el VIX se triplicó hasta alcanzar 62 en un punto de la jornada cuando todavía los mercados en USA no habían abierto y no se podían operar opciones. Al cierre de este informe opera en 42,55. El desarme apresurado del apalancamiento alcanza a todos los activos de riesgo agregando presión sobre el peso.  

El violento giro en los mercados ocurre apenas unos días después de la reunión del Gobierno con las ALyCs, avisando que están asegurados los pagos de la deuda por un año y medio. Puntualmente avisó que tiene los dólares para el pago de intereses de enero que aún no giró al fiduciario, que los cupones de capital los paga con un repo (que a estos precios no es intuitivo dado el nivel de garantías involucrado), que los pagos de julio los paga con superávit comercial (agro y energía) y los dólares se los compra al BCRA con superávit fiscal. No mencionó los pagos de 2026, para cuando esperan después de la elección de octubre volver al mercado de deuda voluntaria.  

El Gobierno informó que la reservas crecerían en USD1.200 millones en agosto, a partir de los desembolsos netos positivos de las IFIs y la reversión de parte del déficit energético por la mejora del clima. A ello habría que adicionar el eventual giro de divisas por el blanqueo, aunque estos valores no entrarían en las reservas internacionales netas. No obstante, estos aportes resultarían sólo una golondrina de verano. Con la continuidad del dólar Blend, el nuevo en pago de dos cuotas de las importaciones y la intervención que puede realizar el BCRA para “esterilizar pesos” y sin incorporar el blanqueo, las reservas internacionales netas seguirían deteriorándose en lo que resta del año para ubicarse en niveles similares a los de un año atrás, de no cambiar el escenario. 

Avisó que la inflación de julio se ubicaría debajo de 4% y que para septiembre el dato estaría más cercana al 1% que al 2%), lo cual, aun manejando la presión cambiaria, no cierra con los anuncios de subas en precios regulados. Puede ser que los números que indicaron de la inflación de septiembre puedan tener en cuenta un eventual impacto en precios de la reducción del impuesto PAIS y una caída de los dólares financieros. No obstante, hay que tener en cuenta que para el cumplimiento de la meta se deberían contener la suba de los servicios, que mayormente está relacionada con los salarios. 

Por el frente financiero, la brecha de los tipos de cambio, que había retrocedido hasta 4 p.p. en la semana para ubicarse en torno al 38%, tuvo una reversión y terminó en promedio en torno al 41%. El incremento de la incertidumbre habría provocado la vuelta del BCRA al mercado, tras varias jornadas sin participación. Sabremos los montos luego.  

Otros tópicos que tocamos en la semana:  

  • Nueva ronda de suba de regulados: el Gobierno autorizó el incremento de la tarifa mínima del transporte automotor, el transporte y distribución del gas y el agua y los precios del combustibles. Las medidas implican un alza de la inflación en el mes de 1 p.p. en el mes, mientras que todavía quedan otros 3 p.p. reprimidos respecto a los mecanismos de indexación.  
  • En julio, la recaudación tributaria alcanzó los $11,9 billones, cayendo un 8,3% interanual en términos reales. Otro mes más donde se remarca que lo de mayo fue una excepción por la entrada de Ganancias más que un cambio en la tendencia. Sin cambios significativos en la economía real, esperamos que los próximos meses los ingresos tributarios sigan cayendo y perjudicando la consolidación fiscal y al programa financiero, forzando el ajuste por el lado del gasto.