Mercado de Trabajo de USA: Afinando el análisis

Si bien la expansión sostenida pero lenta de la economía norteamericana a partir del escenario de tasa cero y la emisión monetaria de la Reserva Federal de USA gatilló una recuperación del mercado de trabajo, todavía persisten obstáculos estructurales heredados de la crisis financiera global que dan cuenta de un escenario de mayor sub-utilización de los recursos productivos. Poniendo el foco en un análisis agregado del mercado de trabajo norteamericano, la caída sistemática de la tasa de desempleo durante los últimos años (desde un 10% en 2010 a 6,7%) en consistencia con un ritmo de creación de empleo en torno a los 183.000 por mes durante el último año, darían cuenta de un escenario de recuperación sostenida del mercado de trabajo. Sin embargo, si el análisis empieza a extenderse a otras variables más específicas que intentan cuantificar el ritmo de la recuperación del mercado de trabajo, las conclusiones pueden adquirir un matiz distinto. Si bien el desempleo de corto plazo (menor a 27 semanas) estaría entrando en la zona a partir de la cual podría comenzar a generar presión inflacionaria (4,2% de la fuerza de trabajo) desde el lado de la presión de los salarios, la tasa de desempleo (6,7%) todavía se ubica en torno a 1,5 p.p. por arriba de la tasa natural de desempleo consistente con un escenario de pleno empleo y estabilidad de precios. Por otro lado, si bien el recorrido descendente de la tasa de desempleo evidencia una recuperación sostenida del mercado de trabajo, la existencia de obstáculos en el mercado de trabajo que persisten en el tiempo como contrapartida de la crisis financiera global (i.e. histéresis), daría cuenta de un escenario con mayor sub-utilización de los recursos productivos. Puntualmente, el desempleo de largo plazo (mayor a 27 semanas) si bien se viene achicando en el margen (35,8% del total de desempleados), todavía permanece en niveles muy altos respecto del período pre crisis (18,5%), poniendo en riesgo la capacidad de este segmento de la oferta de trabajo (ocupados más desocupados) para reinsertarse en el mercado laboral. Asimismo, si bien la tasa de participación de la oferta de trabajo (ocupados más desocupados en porcentaje de la población total) exhibe una recomposición en el margen, (al pasar de 62,8% a 63,2%), aún permanece en niveles muy bajos respecto del período pre crisis (66,2%), como contrapartida del crecimiento de los “desempleados desanimados” que dejaron de buscar empleo. En línea con este escenario de sub-utilización de los recursos productivos en el mercado de trabajo, el crecimiento de los salarios (en torno al 2% anual) se ubica por debajo de los niveles consistentes con un escenario de pleno empleo (entre 3% y 4% anual) en una economía donde la inflación que deflacta el consumo interno (1% anual) se encuentra muy por debajo de la meta de la Reserva Federal del 2% anual. En síntesis, aun cuando la recuperación de la economía siga creando empleo a ritmo sostenido, no va a ser rápida la reducción del desempleo desde estos niveles. Es que parte de la caída del desempleo del 10% en 2010 al 6,7% se explicó por la salida de los “desempleados desalentados” de la oferta laboral (ocupados más desocupados), que en un contexto de sostenimiento de la recuperación económica volverían a buscar empleo, haciendo más lenta la caída de la tasa de desempleo a partir de los niveles actuales. Bajo esta dinámica de recomposición lenta de la oferta de trabajo a partir de la reincorporación de los “desempleados desanimados” y alto endeudamiento de las familias (con una deuda de 80% del PBI) en una economía con inflación por debajo de la meta, la Reserva Federal de USA se tomaría su tiempo –¿hasta el segundo semestre de 2015?- para empezar a subir la tasa de interés de referencia.