Monitor Semanal #506

Monetarias y Financieras Luego de dos semanas sin intervenir en el mercado de cambios, y en medio de un fortalecimiento global del dólar, el BCRA realizó una venta record de divisas en la zona de US$1.200 millones, que se suman a los US$600 millones en las últimas dos jornadas, intentando reforzar la señal de que no convalidará un movimiento del tipo de cambio en el corto plazo por encima del rango de flotación actual. La decisión de intervenir se da en un contexto donde la inflación del primer cuatrimestre se encamina a consumir dos tercios de la meta de 15% del BCRA, y donde el impacto de la corrección tarifaria se ubica a tope de la agenda. En este sentido, el atraso del tipo de cambio vuelve en el corto plazo a funcionar como ancla antiinflacionaria, luego de que en la primera parte del año el movimiento en simultáneo del dólar y las tarifas impactaran fuertemente sobre la dinámica de precios. (…)

Monetarias y Financieras

Luego de dos semanas sin intervenir en el mercado de cambios, y en medio de un fortalecimiento global del dólar, el BCRA realizó una venta record de divisas en la zona de US$1.200 millones, que se suman a los US$600 millones en las últimas dos jornadas, intentando reforzar la señal de que no convalidará un movimiento del tipo de cambio en el corto plazo por encima del rango de flotación actual. La decisión de intervenir se da en un contexto donde la inflación del primer cuatrimestre se encamina a consumir dos tercios de la meta de 15% del BCRA, y donde el impacto de la corrección tarifaria se ubica a tope de la agenda. En este sentido, el atraso del tipo de cambio vuelve en el corto plazo a funcionar como ancla antiinflacionaria, luego de que en la primera parte del año el movimiento en simultáneo del dólar y las tarifas impactaran fuertemente sobre la dinámica de precios.

EMAE

Los datos del EMAE publicados por el INDEC ayer muestran una caída de 0,2% respecto de enero en la serie desestacionalizada (3,7% en el acumulado), acompañando una variación del 5,3% i.a. en la serie original. Por último, en términos del efecto que deja este mes para el primer trimestre, de mantenerse el mismo nivel de actividad en la serie desestacionalizada en el mes de marzo, el arrastre que deja el mes de febrero a la variación del primer trimestre contra el cuarto del año anterior está en torno al 1,1%.

Comercio Exterior

En Marzo, el déficit comercial fue de US$611 millones como resultante de exportaciones que crecieron 17,2% i.a. e importaciones que se expandieron al 8,8% i.a. Por primera vez desde enero del 2017, la variación interanual de las importaciones fue menor a la de las exportaciones; asimismo, las últimas estuvieron favorecidas por una mejora en los términos del intercambio. Cuando se observa la variación en términos de cantidades, el aumento de las exportaciones fue de 9,4% i.a. comparado con el aumento del 6,5% i.a. por parte de las importaciones.

Mercados/Panorama Internacional

La escalada en la tasa a 10 años de los bonos del Tesoro de USA por arriba del 3% gatilló una corrección en los precios de las acciones de EE.UU., en un contexto de mayor volatilidad financiera y de fortalecimiento global del dólar contra el resto de las monedas del mundo. Con respecto a la caída en los precios de las acciones en USA, todo parecería indicar que este proceso tiene más que ver con un  “efecto tasa de descuento” que con los “flujos esperados” de las empresas, dado los buenos resultados de los balances y la expectativa de un mayor crecimiento económico frente a la baja de impuestos. En este contexto, el ratio P/E del índice S&P ajustado por inflación acumula una caída del 6,4% desde enero a abril, en simultáneo con la suba de 50 puntos básicos en la tasa a 10 años de los bonos del Tesoro de USA. De todas formas, el ratio P/E ajustado por inflación todavía se ubica 15,9% por arriba del promedio de los últimos 20 años. En línea con lo que venimos anticipando, la expectativa de un mayor déficit fiscal (mayor oferta de bonos) en USA frente a la baja de impuestos, en combinación con una menor demanda de bonos de la Reserva Federal de USA (Fed) en la parte larga de la curva de rendimientos como contrapartida del retiro de los estímulos monetarios, configuran una tendencia alcista en las tasas de largo plazo. Sobre todo en un contexto donde la inflación de servicios (salarios, vivienda y salud) arranca frente a la baja de la tasa de desempleo y el aumento en el precio internacional del petróleo.