Monetarias y Financieras
En la recta final a la elección del 14 de noviembre (faltan sólo 21 días hábiles), el gobierno sigue mandando señales contradictorias.
Por un lado, el Presidente y el Ministro de economía en sendas reuniones con empresarios avisan que el acuerdo con el FMI está encaminado, y explícitamente mencionan que la vicepresidenta dio el aval para avanzar en esa dirección. Por otro lado, a las medidas de cierre al cepo de la semana pasada de la CNV y el BCRA, se sumó el anuncio de un congelamiento de precios, el cierre del registro de exportación de maíz y los anuncios diarios de medidas de gastos que apuntan a poner plata en el bolsillo en un intento por revertir el resultado de las PASO.
Por lo pronto, el cierre al cepo acotó transitoriamente la sangría de reservas. De hecho, en los últimos cinco días el BCRA compró casi USD500 millones, permitiendo acumular en lo que va de octubre compras por USD280 millones y subir las reservas netas a USD5.872 millones. Asimismo, el corte de los circuitos que relacionan el dólar barato (MEP-AL) con el caro (CCL-GD) le permitió al BCRA recortar la intervención a un entorno de USD7 millones diarios. Esto es un ritmo de USD140 millones mensuales frente a los USD450 millones utilizados durante septiembre que en alguna medida abastecen al mercado de dólar blue que se sostiene en torno a $185.
Al 3,5% de suba del IPC de septiembre, se suma una proyección para octubre que, con dos semanas relevadas, apunta a ubicarse nuevamente en torno al 3% en un contexto donde la presión sobre la brecha cambiaria se combina con una creciente incertidumbre sobre el costo de reposición de insumos y bienes finales, producto del freno en el acceso al MULC para pagar importaciones.
El congelamiento de precios por 90 días anunciado con retroactividad al 1 de octubre alcanza sólo a 1.247 productos y excluye productos frescos que fueron los que más impulsaron la tasa de inflación en el último mes. La rusticidad de la medida no tiene en cuenta la dinámica de los costos que en muchos casos suben por sobre el nivel general, ni el riesgo de que se produzcan faltantes en góndola sobre todo en canales de venta alcanzados por los controles.
Teniendo en cuenta las condicionalidades y la falta de cooperación y coordinación de los jugadores (Gobierno, FMI y oposición), prevemos no será fácil llegar a un acuerdo rápido con el FMI y es cada vez más probable que el Gobierno deba enfrentar un primer trimestre de 2022 muy incierto, por las bajas reservas internacionales netas, los ajustes de precios pendientes y una brecha que irá en alza en la medida que se pospone el acuerdo y el Gobierno entra en atrasos.
Si este es el escenario, lo más probable es que la tasa de inflación le gane a la tasa de interés y a la tasa de devaluación del dólar oficial en los próximos tres meses. Creemos, que al menos en las primeras semanas después de la elección, el BCRA va a mover el dólar oficial a un ritmo más parecido a la inflación incluida en el presupuesto (2,5% mensual frente al 1% mensual registrado en los últimos meses). Ciertamente, si el gobierno queda pedaleando en el aire sin acuerdo y la brecha pasa factura, no resulta intuitivo que el ritmo de devaluación se sostenga en esos niveles, pero no vemos un salto discreto del dólar inmediato después de la elección mientras se intenta buscar un programa con el FMI.
Actividad
La industria y la construcción mostraron sendas caídas en agosto, tras el rebote post cuarentena de mayo. La industria retrocedió 0,6% s.e. mientras que en la construcción lo hizo 2,6% s.e. Parados ya en niveles superiores a los previos de la pandemia (similares a los de agosto de 2018) se observa un freno, frente a stocks elevados y dificultades crecientes para importar.
Precios
INDEC comunicó que la inflación de septiembre cerró en 3,5% mensual (52,5% i.a.), apuntando en nueve meses una suba acumulada de 37%. Este registro rompe con cinco meses consecutivos de desaceleración y deja al número de agosto (2,5%) como un outlier. A su vez, la inflación núcleo no da tregua y trepó al 57,0% i.a. (3,3% mensual) y ya son diez meses ininterrumpidos en los cuales la medición que excluye a los rubros volátiles escala, marcando así una tendencia alcista difícil de quebrar.
Empleo registrado
Los datos de julio marcan un aumento mensual de 0,5% en los puestos formales de trabajo, 2,8% i.a. Los monotributistas y asalariados públicos impulsaron la recuperación mientras los asalariados privados todavía se ubican 1,5% por debajo de los niveles pre-pandemia. Por rama de actividad, la construcción sigue creando empleo formal luego de haber tocado mínimos históricos en plena pandemia.
Mercados/Panorama internacional
La volatilidad en los mercados financieros globales continúa al tiempo que comienza la temporada de balances correspondientes al tercer trimestre. El dato de inflación de los Estados Unidos, que se ubicó por encima de lo esperado, 5,4% i.a. (0,4% mensual), y el dato de inflación mayorista en China, que se aproxima a máximos en 26 años, 10,7% i.a., se conjugan con la expectativa de un menor crecimiento para las economías avanzadas y Asia en desarrollo plasmadas en las proyecciones del FMI. Es en este contexto, y en la antesala del Fed tapering el gap entre el rendimiento de los bonos a tres y dos años llega a un máximo desde el 2017.