Monitor Semanal #746

MUTIS POR EL FORO DEL FMI Y PLANCITO ELECTORAL

Finalmente, tras los deberes cumplidos el directorio del FMI aprobó la quinta y sexta revisión del acuerdo con Argentina y realizó el desembolso de USD7.500 millones. Si bien el nuevo acuerdo fija nuevas metas de política económica, en los hechos el adelanto de la revisión y de los fondos implican que el FMI se retira de la mesa de negociaciones con este Gobierno y espera hasta que sea elegido el próximo. En ese marco, el Ministro/candidato anunció un nuevo programa de sostén al consumo/actividad, probablemente sin el consenso del organismo internacional.

El desembolso permitió que se recuperaran las reservas internacionales netas en torno a USD4.500 millones, tras los pagos de manera adelantada del interés al FMI del mes de septiembre y el puente de Qatar y la devolución del depósito a la CAF. En este contexto se fijaron nuevas metas de acumulación de reservas internacionales netas a septiembre y diciembre próximo que se ven reducidas respecto a las previas en USD9.000 millones y USD6.700 millones respectivamente. A pesar de la magnitud del ajuste, tomando en cuenta la desacumulación actual de USD6.700 millones respecto a diciembre de 2021, en esta semana de agosto y lo que queda de septiembre habría que acumular USD4.500 millones para poder cumplir la meta. Poco probable, salvo un extremo estrangulamiento de los pagos.

Desde el plano fiscal sostener la meta del déficit fiscal, aunque actualizarla a la nueva nominalidad. Así, el déficit primario del año sería de $3,3 billones o el equivalente a 1,9% del PIB. Teniendo en cuenta que a julio el déficit acumulado representa aproximadamente 1,2% del PIB, en lo que resta del año el rojo podría ser de solamente 0,7% del PIB. Observando los resultados obtenidos a lo largo de los últimos años, vemos que el déficit promedio ha sido de 0,9% del PIB desde 2007 a 2022 y que en los años electorales desde 2015 a la fecha este déficit promedio trepa a 1,8% del PIB.

A pesar del desafío fiscal, el Gobierno ha lanzado en el fin de semana un nuevo programa para impulsar y sostener el nivel de actividad de la economía. El Programa de fortalecimiento de la actividad económica y del ingreso fue lanzado a cuentagotas en el fin de semana.

En relación a los ingresos el “plancito” consta de bonos para jubilados, asalariados privados y públicos entre $10.000 y $60.000 pagaderos en cuotas, mayores transferencias para el programa alimentar y de los planes Potenciar trabajo entre $10.000 y $23.000, diferimiento y reducción del componente impositivo del monotributo e implementación de créditos subsidiados para jubilados, trabajadores y monotributistas.

El conjunto de medidas comprende a un conjunto de beneficiarios de hasta 17,8 millones y tendría un impacto de 0,3% del PIB con el costo repartido entre el sector público y el privado y que es equivalente a una suba de la demanda de 3% de cada mes.

Lamentablemente, dado la inflación esperada, el mayor efecto que puede tener la medida es el de equiparar la mayor inflación esperada, tras los precios desatados que se registraron tras la devaluación post PASO. Por otro lado, la duda queda en el comportamiento esperado de los precios, que saltaron fuertemente en el último relevamiento semanal, donde la mayor inyección de liquidez a la economía junto con la alta propensión a gastar pueden alentar una suba en la nominalidad esperada.

Finalmente, el Gobierno también lanzó un set de medidas para sostener la actividad que incluyen créditos para Pymes y fomento de la exportación, junto con las medidas para reducir derechos de exportación. Se destaca la posibilidad que van a tener las empresas oleaginosas de disponer del 25% de las divisas exportadas, que le permitirían elevar la capacidad de pago interna a la soja.

INTERNACIONAL

Esta semana se celebró la cumbre anual número 15 de los BRICS. Evento que atrajo más miradas que lo habitual, opacando incluso al Simposio de Jackson Hole. La persistencia de las tensiones geopolíticas entre China y Estados Unidos, en conjunto con la desaceleración del crecimiento del gigante asiático frente al límite de la expansión basada en inversión y el ascenso de India como nuevo foco de atención y motor del crecimiento global, son algunos de los factores que llevaron a que esta cumbre de los BRICS en particular se destacase.

El grupo ahora amplía sus filas, invitando a Arabia Saudita, Irán, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Argentina y Etiopía a unirse en 2024. Sin embargo, India propone que la incorporación de nuevos miembros se de en forma gradual.