“Caminando” al fondo con el apoyo de bessent⚓⚓⚓
La tercera fase del programa económico enfrenta obstáculos para alcanzar dos objetivos clave en forma simultánea: la reducción de la inflación y la acumulación de reservas consistente con la meta incluida en el acuerdo con el FMI. El gobierno está decidido a apuntalar la primera mientras sigue insistiendo en que el BCRA no va a comprar dólares en el medio de la banda y sólo va a hacerlo cuando el dólar se acerque a los $1.000 de la banda inferior, aun cuando esto implique desaprovechar la estacionalidad de la cosecha.
Adicionalmente, luego de que el jueves el BCRA publicara su balance 2024 con utilidades por $19,4 billones, avisó que va a girar al Tesoro $11,7 billones, algo que también está explícitamente vedado en el acuerdo y va a contramano de la capitalización buscada con el endeudamiento del Tesoro con el FMI para tachar las Letras intransferibles del Tesoro en el activo del BCRA. Claro que despeja la incertidumbre sobre el mercado de deuda en pesos luego de que se achicara significativamente la caja del Tesoro, la que había armado producto del desarme de pasivos remunerados contra deuda del Tesoro más los depósitos en el Banco Nación. Todo mientras sigue sin presentarse el programa monetario más allá de la meta indicativa de activos internos netos del FMI (Base monetaria menos Reservas netas) incluida en el acuerdo y los senderos de agregados monetarios presentados en el documento del BCRA.
Con los USD13.500 millones en la mano, la prioridad sigue siendo octubre y no la letra chica del acuerdo. El espaldarazo de las declaraciones de Georgieva y del propio Secretario del Tesoro de EE.UU. apuntalan, al menos en el corto plazo, la decisión del gobierno y la reacción del mercado con un riesgo país debajo de 700 pbs. Una semana atrás, en reunión privada con inversores en el marco de las reuniones de primavera del FMI, Scott Bessent afirmó que EE.UU. podría ofrecer una línea de crédito si una crisis externa amenazara el cambio económico del presidente Milei. Más aún en un statement del Departamento del Tesoro donde presentó los lineamientos de lo que debería ser el rol del FMI y el Banco Mundial pidió abandonar la agenda actual y enfocarse a prestar a los países que están haciendo los deberes, poniendo como ejemplo la Argentina.
La decisión de girarle al Tesoro parte de las utilidades del BCRA (originadas principalmente en la capitalización del CER y en el no pago de intereses por el traspaso de los pasivos remunerados a Lecaps/LEFI) intenta cerrar el programa financiero. El aumento de los depósitos del Gobierno permitirá aliviar presiones en las licitaciones de deuda en pesos, que enfrenta dificultades para extender los vencimientos. También aportará liquidez para poder comprar las divisas para cumplir con vencimientos importantes de deuda en moneda extranjera, eventualmente va a ser el Tesoro y no el BCRA el que compre los dólares. En la última licitación de abril, el intento de extender los plazos y la necesidad del Banco Nación de recuperar parte de la liquidez entregada para asegurar la primera licitación después del cambio de régimen, el Tesoro sólo rolló el 70% de los vencimientos, consistente con una expansión monetaria de $2,3 billones.
La volatilidad fue la tónica del mercado cambiario. Luego de arrancar la semana debajo de los $1.100 cerró el viernes en $1.174, valor similar al de arranque del programa y 9,7% por encima de los mínimos de la semana previa. A estas tasas de interés, y con el espaldarazo de Bessent la reactivación del carry arranca bastante antes de acercarse al techo de la banda, siempre suponiendo la lectura respecto al camino electoral se sostiene favorable a la gestión actual. Por lo pronto, la formación de precios no se anotició de la recomposición y las empresas todavía siguen a la expectativa, limitadas por una demanda débil. Así, el aumento de los precios de los alimentos de la semana se desaceleró, alcanzando a sólo 0,5% llevando al dato del mes más cerca de 3%.
Finalmente, dos noticias cortitas de la semana:
- En febrero el EMAE (Proxy mensual del PIB), subió 0,8% s.e. y 5,7% i.a. Con esto, el nivel de actividad continúa acercándose a niveles máximos de 2022. El año acumula una suba de 6,2% respecto al primer bimestre de 2024 y deja un arrastre estadístico de 4,9% para 2025.
- 2024 cierra con un resultado positivo para las provincias que, en conjunto, registraron un superávit primario de $4,6 billones (0,4% del PIB) y financiero de $2,7 billones (0,2% del PIB). La caída en los ingresos alcanzó el 26,9% i.a. en términos reales y fue compensada una caída del gasto de 28,7% i.a., muy similar al ajuste del Tesoro Nacional. .
Internacional
En las últimas semanas, bancos y calificadoras de riesgo ajustaron a la baja sus proyecciones de crecimiento global tras considerar los efectos de las políticas arancelarias anunciadas por Estados Unidos a principios de abril. Esto culminó con el Fondo Monetario Internacional (FMI) recortando drásticamente sus previsiones de crecimiento económico mundial para 2025 y 2026. Según su informe, el crecimiento global será del 2,8% este año, un descenso de 0,5 puntos porcentuales respecto a la estimación anterior, y una recuperación moderada del 3% en 2026. La tasa prevista para 2025 sería la segunda más baja desde 2008 y la menor desde la pandemia de 2020.
No obstante, el informe del FMI excluye el freno transitorio en la suba de aranceles. Recordemos que Trump anunció una pausa de 90 días en los “aranceles recíprocos”, pero mantuvo un arancel mínimo del 10% y elevó otros gravámenes sobre productos chinos. En este contexto, la guerra comercial entre ambos países se intensificó, causando interrupciones en el comercio mundial. Aunque Trump prometió llegar a un acuerdo con China, las negociaciones aún no han comenzado, y China pidió que los aranceles vuelvan a foja cero para sentarse a negociar.